domingo, 31 de octubre de 2010

Jauria Salvaje


- ¿Has oido eso?
- Es sólo el sonido del viento
Que mece las ramas
De los tristas árboles

- ¿Has oído eso?
- Es sólo el aullido del lobo
Que llama en las grutas
Terribles tormentas

- ¿Has oido eso?
-¿Es el repiqueteo de la lluvia
Que cae sobre la tierra
Como un ejército.

- ¿Has oído bien, hemano?
No es el lobo, el viento o la lluvia.
Nos son los árbolas, las grutas, la tierra.
Hay algo más.

Escucha bien, hermano.
Oigo el lamento agundo
del coro de las banshees
que cantan por sus muertos.
Los que son nuestros muertos.

Escucha bien, hermano.
Pigo el aullido desgarrado
De la jauría en plana caza.
Los gritos de guerra de los dioess
Con lo que no debemos cruzarno.

Escucha bien, hermano.
Oigo el cabalgar de sus caballos.
Es el ruido de los pasos
de los epíritus salvajes
que esta noche llenan los pastos.

Ciclotimia estacional: Samhain

Samhain no comienza la noche de las animas, ni el dia de los santos, ni el de los difuntos.
Samhain comienza antes de Samhain, cuando ella, la que vestia de beige, decide que tiene bastante.
Su cabello es ahora blanco, y ha decidido vestir de negro. No por ninguna razón en especial. Solamente por que le apetece.

Ella tiene menos paciencia. Ha decidido que ya basta de ser correcta y que desea ser ella misma.
Y los demás.... pues... que les atropelle un tranvía.
Ella dice lo que piensa, aunque duela. Es más, mejor si duele.
Ella te da lo que necesitas para aprender... muchas veces, un buen azote.

En el fondo, ella lo sabe. El final no está lejos. Y no es el momento de pensar en el qué dirán.
Arreglar las cosas a veces solo puede hacerse rompiendo unos cuantos esquemas. Y es lo que toca.

lunes, 18 de octubre de 2010

Cuando el sabio señala el cielo...

Muchas veces entre paganos es común que haya discusiones sobre temas de índole religiosa y espiritual, más que de indole social o de convivencia.

Como paganos, somos diversos, y en nuestras círculos sociales nos movemos personas que somos de hecho, de confesiones religiosas distintas. Tenemos creencias distintas, modos de ver la vida distintos y herramientas de adaptarnos a ello, diversas.

Sin embargo, antes o después, cada unoa nuestra manera, todos buscamos lo mismo. Buscamos la mísitica.

Creo, sinceramente, que hemos de perderle el miedo a según qué palabras, como religión o como mística. Entendamos la mística por lo que es: el proceso y experiencia por el que se alcanza la unión inefable y comprensión de lo divino en su propia dimensión.

Toda religión tiene muchas facetas. Una de ellas, por ejemplo, es la de ordenación social. La vía mísitica es sólo una de las facetas, que aunque sea una de las más buscadas, en el fondo también es una de las más raras de transitar. El encuentro con lo divino no se produce de una manera facil en ninguna tradición religiosa, y el paganismo y sus tradiciones tampoco son excepciones, a pesar de que al contrario que muchas otras, no niegan esa posibilidad. Y es que la via principal de la mística es el extasis, y éste es dificil y muchas veces doloroso.

Reconozcamoslo, queremos comunicarnos directamente con los Dioses, con lo divino, sea como sea que lo concibamos e interpretemos. Pero tampoco deseamos dolor. ¿Cual es el balance? Dirigirnos a otras vias. Como sacerdotes o como sencillamente paganos, podemos dirigirnos directamente a la divinidad, pero libres del éxtasis y la experiencia traumática de una posible revelación.

Podemos ser perfectamente buenos paganos, e incluso definirnos como personas espirituales dado el tiempo que dedicamos a nuestra espiritualidad (o incluso al llamado "mundo de los espíritus") sin tener por ello que definirnos a nosotros mismos como místicos.

Contemos además, el hecho de que la experiencia mística es inefable. Si en algo coinciden todos los que en algun momento han experimentado este tipo de comunicación con lo divino, es que por mucho que se esfuercen, sencillamente el lenguaje no alcanza para describirlo. Lo cual implica que la experiencia mísitica no puede ser compartida, ni comunicada. Y cuando intenta serlo, se tope irremediablamente con la imposibilidad de esta comunicación por parte del que la expresa y por parte de aquel que escucha.

La mística es una via hermosa, pero no por ello tenemos que tomarla a todas horas y en todos los casos. En muchos sentidos, es inservible, a un nivel comunal. Sencillamente, es.

Entonces, ¿por qué la buscamos? ¿Por qué consideramos que la via mistica es la forma más perfecta de religiosidad? Al fin y al cabo, la mísitica destierra muchas de las funciones normales de la vida religiosa, especialmente todas aquellas que tienen que ver con la comunidad.

Aquellos que, entre nosotros, tengan las características necesarias para ser místicos no son, por fuerza, personas con una bendicion. Tal vez sean, de nosotros, los que menos sentido le encuentren a su camino, los que peor se sientan por no poder compartise con el resto. Así que respetemos lo que tienen, su camino, y no tomemos su nombre para nosotros mismos.

Dejemosles señalar al cielo, aunque para ellos tenga una dimensión distinta que para el resto.


http://pfi-esp.org/content/view/207/198/

... el necio mira al dedo

Hace poco y por motivos diversos que tiene la vida, me llegó un teléfono móvil nuevo. Un modelo de estos modernos, llenos de cosas de las útiles y de las inútiles también. De éstos que se pueden personalizar.
Y entonces, me descubrí a mi misma poniendo una aplicación de fases lunares. Me di cuenta en ese momento que las páginas web que más visito tienen esta aplicación. Que mi perfil facebook también. Así como la de muchos de mis amigos paganos.

Y pensé... ¿por qué? ¿Qué me pasa? ¿Tan metida estoy en mi propio mundo, tan encerrada entre bits y chips? ¿Tanto he mirado mi propio ombligo que no puedo mirar de vez en cuando al cielo para seguir la fase de la luna, que siempre está tan cerca?

¿Necesitamos que un programa informático nos recuerde cuales son nuestras premisas religiosas? ¿Que nos diga cuándo y como celebrar, si celebrar?
¿O es más bien que necesitamos que el mundo nos mire y reconozca? ¿Queremos gritar fuertemente "mirad, esta pagina/blog/perfil pertenece a un pagano, que es incuestionablemente alguien especial?

¿Qué dice esto de nosotros como comunidad y como individuos?
¿Somos personas orgullosas de nuestras creencias o unos pequeños inmaduros que necesitan que otros como ellos les miren y les digan lo espirituales que son?
¿Somos una comunidad religiosa real que celebra sus fiestas o unas cuantas personas que necesitan que se las anime y recuerde para ello?
¿Vivimos nuestras religiones de forma natural, o sencillamente expresamos lo que creemos que debemos expresar a través de internet y las nuevas tecnologías y adiós, muy buenas?

En otras palabras... si el sabio apunta al cielo, ¿que hacemos nosotros? ¿Mirar al cielo? ¿Mirar al dedo? ¿O actualizar la version de nuestra aplicación de lunas para nuestra web?

Publicado en http://pfi-esp.org/content/view/206/198/

viernes, 1 de octubre de 2010

Herederos de los Burning Times?


La frase “never again the burning times” ha calado muy hondo en todos los paganos y neo-paganos, especialmente aquellos que siguen una tradición de herencia brujeril, como los wiccanos. Entre los españoles y latinos especialmente, este concepto ha propiciado un miedo a la visibilización y a la persecución religiosa.

En origen, esta frase es una proclama orientada a unir al movimiento pagano para la consecución de sus derechos, especialmente en lo que respecta a la expresión pública de su religión y formas espirituales. Sin embargo, esta parte del mensaje raramente ha llegado a los paganos hispanohablantes. Nosotros hemos tenido que conformamos con el relato pseudohistórico de que la inquisición mató en las hogueras a millones de paganos bajo los cargos de herejía y brujería.

En la realidad, el concepto de los “burning times” no abarca solamente la edad media, si no que se extiende hasta el bien entrado el siglo XIX, cuando todavía se podía condenar a una persona bajo estos mismos cargos. ¿Qué decir de las cifras de condenados y muertos que habitualmente se manejan, además de que son obviamente falsas? La población de Europa era bastante reducida en los siglos que nos ocupan, y la fiebre de quema de brujas fue algo localizado tanto en el tiempo como en el espacio. Si bien es cierto que la inquisición existió y tuvo fuerte influencia por toda Europa, creando ramas específicas en todos los países, perseguir paganos o brujos nunca fue su prioridad.

La inquisición perseguía principalmente herejías cristianas, así como individuos judeizantes o moriscos, esto último especialmente en España.

Si existieron zonas concretas en las cuales hubo unas cifras escandalosas, y es a partir de estos datos cómo llegó a extrapolarse la ya popular cifra de nueve millones. Un estudioso del siglo XVIII. Esta persona utilizó como muestra para sus datos una zona muy concreta de Alemania y un periodo corto de tiempo y sencillamente, multiplicó la cifra para abarcar todo el arco temporal y espacial de su estudio. Por eso, y dado que tomó los datos de un momento extremadamente activo en juicios por brujería, el número de victimas es tan extremo. Sin embargo, los estudiosos actuales han hecho una aproximación a partir de los textos inquisistoriales de la época, y concluyeron que el número de ejecutados rondama entre los 200.000 y 400.000 para toda Europa y todo el periodo comprendido entre los siglos XIII y XIX.

Podríamos preguntarnos, sin sonrojo, el motivó de que las cifras varíen tanto entre los estudiosos modernos. Ocurre que todas estas cifras son solamente apreciaciones, y por tanto no existe una cifra cerrada y constrastada. Al usar fuentes inquisitoriales, siempre debemos tener en cuenta que es posible que se hayan registrado más acusados y condenados de los que existieron en realidad, para dar una impresión de mayor fuerza o eficiencia en el trabajo del tribunal inquisitorial. Al mismo tiempo, hemos de recordar que en el algunas zonas, como en Inglaterra, el cazador de brujas no era una empleado de la Iglesia o un inquisidor, si no que era un profesional independiente que acudia a la llamada de las autoridades civiles y que percibia un sueldo en función del número de brujas cazadas, por lo que sería razonable suponer que este cazador inflara el número de sus “presas” por una cuestión meramente económica.

Pero aún más importante creo yo que si la cifra es o no incorrecta es concluir si los ejecutados a los que se refieren estas cifras eran, en cierto modo, nuestros ancestros. Hemos de comenzar por negar la afirmación de que muchos fueron quemados por ser wiccanos. Aunque es de suponer que éste dato es más que conocido, la wicca como no tal no existía antes de su fundación por Gerald Gardner en los años 50 del siglo XX. De existir algún culto brujeril relacionado con la moderna wicca, éste tomaría de buen seguro otro nombre y forma de describirse.

Mas allá de esto, ¿eran paganos? Mayormente, no. Como ya hemos comentado antes los perseguidos por la inquisición era principalmente herejes cristianos, incluso alguno de ellos realmente satánico. Esto no quiere decir que no existiese en estas prácticas heréticas o entre las cosas de las que se acusaba en los juicios algunos restos de alguno de los cultos paganos más antiguos de las zonas en concreto, pero esto no es la tónica general de los juicios inquisitoriales.

Entonces, si establecemos que hubo relativamente pocos ejecutados y que una extensísima mayoría por no decir la práctica totalidad de ellos lo fueron por sus actividades heréticas cristianas y no por practicar ninguna religión pagana… ¿por qué tomamos la inquisición como un referente social de tal forma que hoy día sigue provocando un temor irracional en todos nosotros?

Publicado originalmente en http://pfi-esp.org/content/blogcategory/54/198/